Introducción
Las variables, incluidas las variables de entorno, son elementos fundamentales en la informática con numerosas funciones críticas:
- Manejo de datos: Las variables sirven como contenedores en la memoria para almacenar y manipular datos, lo que permite que los programas trabajen con valores durante toda su ejecución;
- Adaptabilidad dinámica: al utilizar variables, los programas logran un comportamiento dinámico, lo que les permite ajustarse de manera flexible a diversas entradas y condiciones;
- Código legible y mantenible: la asignación de nombres significativos a los datos mediante variables mejora la legibilidad del código, lo que facilita que los desarrolladores y mantenedores comprendan y trabajen con el código;
- Reutilización del código: las variables promueven la reutilización del código al almacenar datos en un lugar al que se puede hacer referencia y reutilizar varias veces, lo que reduce la redundancia y promueve prácticas de programación eficientes;
- Paso de parámetros: cruciales para el intercambio de datos dentro de un programa, las variables facilitan el paso de información entre diferentes partes de un programa o funciones, permitiendo que las funciones reciban entradas y devuelvan resultados al código que las llama;
- Gestión de la configuración: las variables de entorno, en particular, son valiosas para almacenar los ajustes de configuración y el sistema.-amplia información, proporcionando un método conveniente para modificar el comportamiento del programa sin alterar el código fuente.
Las variables de entorno desempeñan un papel fundamental en la programación, ya que permiten el almacenamiento de datos, el ajuste del comportamiento del programa y la legibilidad del código. Son indispensables en el desarrollo de software y la administración de sistemas, ya que garantizan prácticas informáticas eficientes y adaptables.
Tipo de variables de entorno
Hay tres tipos de variables de entorno y se dividen por ámbito de aplicación en todo el sistema operativo. En primer lugar, consideramos las variables del entorno local. Representan celdas de memoria que se crean en la sesión actual y no escriben en los archivos de configuración. En lugar de esto, se almacenan en la memoria caché y se eliminan por evento de cierre de conexión y cierran sesión por perfil a través de comandos especiales.
Si desea continuar usando esas variables o necesitaba guardar procesos en estado de trabajo, puede usar detectar utilidad. Hacen terminal virtual y permite desconectarse del sistema. Veamos cómo administrar ese tipo de variables: para crear, eliminar y cambiar.
export VARIABLE_LABEL=value
También puede mostrar la variable con el siguiente comando:
echo $VARIABLE_LABEL
Este comando establece una variable de entorno local para la sesión actual, sin embargo, resalta el alcance de uso de esa celda de memoria. Si la establece en una utilidad o en un programa, estará disponible en el proceso correspondiente. Cuando el proceso termina, la variable también deja de existir y sus valores no se pasan a otros procesos ni a nuevas sesiones. Si desea cambiar el valor, puede hacerlo utilizando el mismo comando que describimos anteriormente:
export VARIABLE_LABEL=new-value!
Pero si desea eliminar esta variable, debe escribir esto:
unset VARIABLE_LABEL
O puede asignar un campo vacío para simplificar la eliminación:
VARIABLE_LABEL=
Sin embargo, imagine una situación en la que necesite eliminar durante algún tiempo su variable y recuperar el valor como vimos antes. Para eso podemos ejecutar la utilidad, el shell y cualquier proceso sin variables:
env -i bash
Escalemos el rango de uso y observemos las variables de entorno del usuario, que implementan y guardan cada sesión, en comparación con las variables de entorno locales, para un usuario. El esquema del proceso es lo suficientemente similar, pero ahora escribimos ese comando en el archivo, que comienza cada vez que iniciamos sesión en el sistema.
Entonces, es automatizar el proceso de iniciar el comando en el archivo y hacerlo más simple. Podemos trabajar con dos archivos principales: .bashrc que utilizan para la configuración del usuario local y .bash_perfil que usamos para la conexión de usuario remoto a través de SSH protocolo. Para el último, si no está disponible por algún motivo, el sistema buscará .bash_login y .perfil. Podemos encontrar ese archivo por comando a continuación:
find . -name bashrc
Si no puede encontrar el archivo necesario de variables de conexiones remotas para el usuario, intente buscar .bash_login y .perfil. Editemos el archivo y agreguemos el raw necesario:
nano ~/.bashrc
Y agregue la variable necesaria en el archivo con el siguiente comando:
export GG='Nice to meet you!'
Guarde el archivo con el comando después de cerrar el editor de texto:
source ~/.bashrc
Y por último, considerando que la variable de entorno es global, destacamos y recordamos que los nombres y las etiquetas de las variables indican el alcance del uso. Actualmente, el alcance cubre todo el sistema de cualquier usuario. Podemos editar su archivo. bash.bashrc, entorno, perfiles. También se dividen en varios puntos para un tipo específico de conexión de usuario. Por ejemplo podemos modificar entorno y que afectan a todos los usuarios, en el sistema independientemente de su tipo de conexión:
nano /etc/environment
Ingrese a la fila de abajo y guarde el archivo con las combinaciones de botones Ctrl + A:
export gg='Jay's dog byte me! '
Aplicando cambios en el por el comando:
source /etc/environment
Solo para el usuario de conexión local podemos configurar bash.bashrc con el mismo comando para enter:
export gg='Jay's dog byte me! '
source /etc/bash.bashrc
Solo para usuarios de conexión remota con rango de todo el sistema, podemos modificar perfiles también usando el mismo comando:
export gg='Jay's dog byte me! '
source /etc/profile
Para eliminar esas variables, necesitamos, en consecuencia, eliminar esas variables de todos los archivos en los que agregamos eso o usar desarmado comando como lo describimos antes.
Y cómo puede ver, ya no mostramos después de eso.
Conclusión
Las variables de entorno desempeñan un papel crucial en la informática y ofrecen diversos beneficios para el desarrollo de software y la administración de sistemas. Sirven como contenedores para almacenar y manipular datos, permiten un comportamiento dinámico en los programas, mejoran la legibilidad del código y facilitan su reutilización. Además, las variables de entorno son vitales para el paso de parámetros y la gestión de la configuración, ya que proporcionan un método conveniente para modificar el comportamiento del programa sin alterar el código fuente.